Bajar las escaleras de espaldas

Sinopsis

Patricia, prostituta de lujo, Jara, modelo de una escuela de arte de barrio, y Carlos, propietario de cuatro supermercados, hicieron una promesa a su madre antes de morir: juntarse en una comida para brindar por ella. Ha llegado el momento de hacerlo, tres años más tarde, en la casa zen de Carlos. Allí, delante de su retrato, comienzan a despejarse las dudas de por qué no han cumplido antes esa promesa. Allí descubrimos que en todas las familias cuecen habas (y en algunas asan tostón). Allí nos daremos cuenta de que, quizás, todos son o somos como esas personas a las que les duelen la rodillas y bajan las escaleras de espaldas porque así se hacen la ilusión de que no se perjudican.

Allí ocurre todo, quizás demasiado tarde, pero ocurre.

La familia como centro, como núcleo, como zona cero en la que todo ocurre, todo importa y todo explota. La familia, lo más importante y, por tanto, lo que más hay que analizar y cuidar. La familia, el gran tema, el gran hongo nuclear.